La 4 T
(Suena como anuncio de tortería, no?) A más de 2 meses y medio, el convencimiento del amor, el cariño, los valores y demás muestras de afecto y respeto de las autoridades por los ciudadanos, éstos no acaban de entender o aceptar que deben cambiar y aceptar los cambios, emanados de ellos mismos. 1. Semáforos. Un sinnúmero de conductores siguen pensando que el rojo es una luz llamativa pero que no significa nada, personalmente de 30 conductores que he visto 25 son mujeres. Algo tan simple como la observancia de un reglamento que además implica que no se atenta contra la seguridad de los peatones; ¿no es aceptado por dichos entes? Con el agravante de que en muchos casos, un oficial de tránsito atestigua dicha situación. 2. Manifestantes. Diversos grupos siguen cerrando calles, aduciendo su derecho a manifestarse y a no ser reprimidos. La autoridad, sea quien sea, hace absolutamente nada por retirarlos.