ABRAZOS Y (NO) BALAZOS

Una de las Promesas del presidente LObrador, al inicio de su gobierno fue,  que combatiría la violencia en México con un enfoque diferente:  Ya no habría Guerra, ni Violencia Armada (las mayúsculas son para remarcar las expectativas del presidente).   

Declaro en un tono,  que se pensó era broma que habría:  Abrazos y No Balazos.  La oferta suena interesante, pero ..........   Declaró, igualmente, que empezaría una serie de aciones que contribuirían a este logro:   Educación, becas, cambio de Ninis a estudiantes y aprendices y trabajadores y que ya NO habría interés en convertirse en narcos (Éso dijo!).

Pero ...............  La Educación la ofreció creando Universidades,  sin la jerarquía ni el respaldo de instituciones como la Unam o similares.   Algunas que sólo ostentan el nombre y no brindan al estudiante la certeza de recibir la formación básica mínima para ostentarse, al final de su estancia en la escuela, como un licenciado en la especialidad que eligió.  Las becas, son casi simbólicas y más bien para el discurso y con un cúmulo de requisitos para recibir algo simbólico.   Los ninis,  siguen considerando que no quieren becas formativas ni quieren ser aprendices (para ganar el mínimo o menos,  NO!).   Así qué ..................

Hay otras opciones más productivas e interesantes,  desde la informalidad a la violencia extrema.

Cada que puede enfatiza que se combate la violencia,  con alguno de sus muchos proyectos, pero ........ la situación no termina de resolverse, o como diría un locutor norteamericano, Buck Canell:   Esto no se acaba,  hasta que se acaba!                  

Tal vez su idea es evitar que jóvenes no atraídos o recién enganchados,  crean en la propuesta presidencial;   pero los que ya están en la Zona Mortal (los que ya forman parte de alguno de los Cárteles o Grupos delincuenciales)  QUÉ?   

Ellos ya saben que la Única Salida, la salida final es la Muerte y que mientras tanto deben tener lo más que puedan a cambio de su Sacrificio:   joyas, lujos, autos, motos, mujeres, vinos, ropa, como una Chispa:  incandescente unos segundos, para desaparecer después;  algunos afortunados (?) serán encarcelados y purgarán sentencias de muchos años en condiciones deplorables.

Éstos,  son los preocupantes,   están armados,  entrenados por militares profesionales, de México o de otras naciones, y asumieron su papel como un grupo que gana o muere.

¿Cómo va a resolver esta situación el presidente?   Seguirán las matanzas de Mexicanos:  civiles o de cárteles o grupos (al final, TODOS son Mexicanos!).  Su promesa de cuerpos de seguridad,   como la Guardia Nacional, que sería civil y después no;   que normalmente llega a atestiguar los enfrentamientos, o peor, a verse superados (en armamento) por los criminales o a caer en emboscadas;  para después en ceremonias pomposas declarar que:   Lamentamos lo sucedido a nuestros compañeros, que cayeron en cumplimiento del deber y esto no volverá a pasar (hasta que vuelve a suceder) y su sacrificio no será en vano.  

Lo grave es que no parece haber quien le plantee al presidente una revisión analítica de la situación y le proponga, incluso, la petición de asesoría, apoyo, ayuda a otras naciones que han combatido exitosamente situaciones como esta o con una fuerza de combate sólida.

Así es que seguiremos abrazando a los malos, aunque ellos nos echen balas!   Aunque hay excepciones:  la familia del señor Guzmán Loera no le disparó al presidente.   He ahí el ejemplo de lo que hay que hacer.

Posiblemente la intención del presidente sea  la correcta pero más adelante.   Ahorita,  se debe evitar que los malos sigan proliferando y haciendo daño y convenciendo a niños y jóvenes de que su vida es valiosa y deben vivirla y convertirse en Mexicanos de bien,   evitando siempre y en todo lugar y momento la muerte y la violencia.